Hechos 9:32-35

Haz click en las siguientes 2 opciones para abrir un menú desplegable y escoger el libro que desees leer o usa el buscador para ir a un libro y capítulo específico.

Utiliza las 3 barritas de abajo para buscar el libro que desees leer o el buscador para ir a un libro y capítulo específico.

Hechos 9:32-35  Estudio por Pastor Daniel Praniuk

Introducción

En Hechos 9:32-35, vemos a Pedro visitando a los santos en Lida, donde se encuentra con un hombre llamado Eneas, postrado en cama durante ocho años debido a una parálisis. Este pasaje es un recordatorio del poder sanador de Jesucristo y del impacto transformador que tiene Su obra en las vidas de las personas. Además, muestra cómo la sanidad física y espiritual de una persona puede llevar a muchos a la fe en el Señor.

Punto 1: La Visita de Pedro a los Santos

Versículo clave: «Aconteció que Pedro, visitando a todos, vino también a los santos que habitaban en Lida.» (Hechos 9:32)

Explicación: Pedro, como líder de la iglesia, se dedica a visitar a las comunidades de creyentes para animarlas y fortalecerlas. Su presencia en Lida no es casual, sino una expresión del cuidado pastoral y el llamado a edificar la iglesia en unidad.

Aplicación práctica: Dedica tiempo a visitar y fortalecer a otros en la fe. A veces, una palabra de ánimo o un acto de servicio puede ser el impulso que alguien necesita para seguir adelante. Sé una fuente de apoyo y edificación para los demás.

Punto 2: La Condición de Eneas

Versículo clave: «Y halló allí a uno que se llamaba Eneas, que hacía ocho años que estaba en cama, pues era paralítico.» (Hechos 9:33)

Explicación: Eneas estaba en una situación aparentemente desesperada, postrado en cama por ocho años. Su incapacidad refleja la impotencia humana frente a ciertos problemas, pero también prepara el escenario para una intervención divina.

Aplicación práctica: Enfrenta tus circunstancias difíciles con fe. Aunque las limitaciones humanas parezcan insuperables, recuerda que para Dios no hay nada imposible. Él puede intervenir en los momentos más oscuros de nuestra vida.

Punto 3: La Declaración de Sanidad

Versículo clave: «Y le dijo Pedro: Eneas, Jesucristo te sana; levántate, y haz tu cama. Y enseguida se levantó.» (Hechos 9:34)

Explicación: Pedro no toma crédito por la sanidad, sino que señala directamente a Jesús como el sanador. La sanidad de Eneas ocurre instantáneamente, demostrando el poder y la autoridad de Jesucristo.

Aplicación práctica: Reconoce a Jesús como la fuente de poder y restauración en tu vida. Cualquier cambio positivo o milagro que experimentes debe ser un testimonio para glorificar Su nombre.

Punto 4: El Impacto en la Comunidad

Versículo clave: «Y le vieron todos los que habitaban en Lida y en Sarón, los cuales se convirtieron al Señor.» (Hechos 9:35)

Explicación: La sanidad de Eneas no solo transformó su vida, sino que impactó a toda la comunidad, llevando a muchos a la fe. Este pasaje resalta cómo Dios usa los milagros para revelar Su poder y atraer a otros a Él.

Aplicación práctica: Permite que tus testimonios sean luz para los demás. Comparte lo que Dios ha hecho en tu vida, de manera que otros puedan conocer Su amor y poder.

Punto 5: La Continuidad de la Obra de Jesús

Explicación general: Este milagro de sanidad demuestra que el ministerio de Jesús continúa a través de Sus discípulos por medio del Espíritu Santo. El llamado de los creyentes sigue siendo proclamar Su nombre, sanar corazones y transformar vidas.

Aplicación práctica: Confía en que Dios puede usar tu vida para impactar a otros, tal como usó a Pedro. Permanece disponible y dispuesto a servir a donde Él te llame.

Conclusión

Hechos 9:32-35 es un recordatorio poderoso del amor sanador de Jesús y de cómo Él transforma tanto vidas individuales como comunidades enteras. Este pasaje nos anima a confiar en Su poder, a testificar de Su obra y a ser instrumentos de Su gracia en el mundo.

Nunca subestimes lo que Dios puede hacer a través de ti. Si Él pudo usar a Pedro para sanar a Eneas y transformar una comunidad, también puede obrar maravillas en tu vida. No importa cuán grande sea tu desafío, recuerda: Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre.

Hoy, permite que Jesús sane las áreas rotas de tu vida. Acércate a Él con fe, y comprométete a compartir Su amor con los demás, para que otros puedan experimentar Su poder transformador.

Oración Sugerida: Señor, gracias por tu poder sanador y por el amor que transformas nuestras vidas. Ayúdame a confiar en Ti en medio de las dificultades y a ser un reflejo de Tu gracia para otros. Usa mi vida para impactar positivamente a los que me rodean. En el nombre de Jesús, amén.”


Preguntas para Reflexión :

Libro de Hechos 800 400

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *