Lucas 18:15-17 Estudio por Pastor Daniel Praniuk
Introducción
En Lucas 18:15-17, Jesús resalta la importancia de recibir el Reino de Dios con la pureza y humildad de un niño. En una cultura donde los niños eran considerados insignificantes, Jesús los coloca como ejemplo del tipo de fe que todos debemos tener. Este pasaje nos desafía a reflexionar sobre cómo nos acercamos a Dios: ¿Con confianza y sinceridad, o con orgullo y autosuficiencia
1. La importancia de los niños en el Reino de Dios
Versículo: «Traían a él los niños para que los tocase; lo cual viendo los discípulos, les reprendieron.» (Lucas 18:15)
Explicación:
Los discípulos veían a los niños como una distracción, pero Jesús les da un lugar de honor. Esto muestra que todos, sin importar su edad o posición, son valiosos para Dios. En el Reino de los cielos no hay personas «demasiado pequeñas» o «sin importancia». Los niños representan la vulnerabilidad y la necesidad de cuidado, características esenciales para depender de Dios.
2. La reprensión de los discípulos
Versículo: «Lo cual viendo los discípulos, les reprendieron.» (Lucas 18:15)
Explicación:
Los discípulos intentaron impedir que los niños se acercaran a Jesús, posiblemente pensando que no eran dignos de su tiempo. Esto refleja una mentalidad errónea de jerarquía en la espiritualidad. Jesús demuestra que el Reino de Dios está abierto para todos, especialmente para aquellos que el mundo considera menos importantes.
3. La invitación de Jesús a los niños
Versículo: «Mas Jesús, llamándolos, dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis.» (Lucas 18:16)
Explicación:
Jesús no solo acepta a los niños, sino que los llama. Este acto subraya que el amor y la gracia de Dios están disponibles para todos. Además, su llamado es un recordatorio para no ser obstáculos en el acercamiento de otros a Cristo. Como creyentes, debemos ser puentes hacia Jesús, no barreras.
4. La cualidad infantil requerida para entrar al Reino
Versículo: «Porque de los tales es el Reino de Dios.» (Lucas 18:16)
Explicación:
Jesús usa a los niños como ejemplo de la actitud requerida para pertenecer al Reino: humildad, confianza y dependencia total de Dios. Los niños no se acercan con pretensiones, sino con sinceridad. Así también, debemos despojarnos de nuestro orgullo y confiar plenamente en la gracia divina.
5. La enseñanza clave de la fe sencilla
Versículo: «De cierto os digo, que el que no recibe el Reino de Dios como un niño, no entrará en él.» (Lucas 18:17)
Explicación:
Recibir el Reino de Dios como un niño implica tener un corazón abierto, una fe pura y una disposición humilde para aceptar el amor de Dios. Jesús establece que nuestra relación con Dios no depende de nuestras obras o logros, sino de nuestra capacidad para confiar en Él como un niño confía en su padre.
Conclusión
El pasaje de Lucas 18:15-17 nos recuerda que el Reino de Dios no es un lugar para el orgullo, sino para aquellos que se acercan a Él con humildad y confianza. Nos invita a examinar nuestras actitudes y a despojarnos de cualquier barrera que impida nuestro acceso al Padre. Dios valora la sinceridad y la dependencia genuina.
Cuando Jesús llama a los niños, nos está invitando a todos a recordar la pureza y la sinceridad con la que fuimos creados para relacionarnos con Él. ¡Qué maravillosa noticia saber que no necesitas perfección, sino disposición! Camina hoy confiado en que, como un niño amado, puedes acudir al Padre con todo lo que tienes y Él te recibirá con los brazos abiertos.
Reflexiona sobre cómo te acercas a Dios. Busca desarrollar una fe sencilla, confiada y pura. Sé un modelo de humildad para quienes te rodean, especialmente para los más jóvenes y Fomenta espacios donde otros puedan acercarse a Jesús sin barreras.
Oración sugerida: Señor, ayúdame a acercarme a Ti con un corazón humilde, lleno de confianza y sinceridad. Hazme sensible a las necesidades de otros, para que nunca sea un obstáculo, sino un puente hacia tu amor. Amén.
Preguntas para Reflexión :
- 1. ¿Cómo puedo recibir el Reino de Dios con un corazón humilde como el de un niño?
- 2. ¿He sido un obstáculo para que otros se acerquen a Jesús?
- 3. ¿Qué características de los niños puedo imitar en mi vida espiritual?
- 4. ¿Cómo puedo ayudar a los más vulnerables a sentirse amados por Dios?
- 5. ¿Qué necesito entregar a Dios para depender completamente de Él?
